La Barranca

  • Rafa Martínez

El guitarrista José Manuel Aguilera y el bajista mexico-estadounidense Federico Fong se conocieron en el efímero grupo del Dr.Fanatik, La Suciedad de las Sirvientas Puercas, en 1990, en el que participó también el baterista del grupo Caifanes, Alfonso André. Posteriormente, Federico colaboró en Sangre Asteka, grupo conformado por José Manuel y Humberto Álvarez desde 1986, junto a otros músicos.

Tras la disolución de Sangre Asteka, José Manuel y Federico comenzaron a grabar juntos, en una portaestudio de cuatro canales al final del año 1994, algunos temas como “Al final de la playa”, “Los muertos”, “El sur”, “Tu boca”, “La barranca” y “El síndrome”, en la búsqueda de un sonido propio, mexicanista, sin rayar en el cliché. Sus hallazgos los dirigieron a la composición de material suficiente para grabar un disco.

Necesitaban a un baterista y acudieron a Alfonso André, con quien terminaron de darle forma a su concepto. En la semana de 1995 viajaron a Guadalajara para grabar de manera formal el que sería el disco El fuego de la noche, con Tuti Perales como ingeniero de grabación en Oigo Estudios, Zapopan. Alfonso sugirió el nombre de una de sus canciones para llamar así al grupo, que hasta entonces carecía de denominación: La Barranca. Grabaron las voces en los estudios El Cuarto de Máquinas y El Sótano con los ingenieros Luis Cortez y Luis Gil, en la Ciudad de México. Fue mezclado por Mike Harris y Matt Leland en Signature Sound, San Diego. Su primera presentación la dieron en el Bar Mata de la Ciudad de México, en septiembre.

El fuego de la noche salió en 1996, editado por Opción Sónica/MCA. Contuvo temas como “Reptil”, “Akumal”, “Esta madrugada”, “Don Julio”, “Quémame lento”, “El mezcal”, “El cometa” y “Cerca del fuego”, entre otros. El sencillo promovido fue “El alacrán”, que contó con un video. Como colaboradores tuvieron a Cecilia Toussaint en los coros y voces, Jorge Gaytán en el violonchelo y el violín, Vico Gutiérrez en los teclados, Chuyín Barrera en la percusión, Diego Maroto en el sax tenor, Nacho Maldonado en el sax barítino, Geraldo Velasco en la trompeta y Concepción en la risa. El disco fue bien recibido por los medios y la crítica en general en México y el área de California, Estados Unidos.

Paralelamente se dio una circunstancia que ayudó a generar atención alrededor de ellos, ya que los miembros de La Barranca se unieron a Saúl Hernández en su nuevo proyecto post Caifanes, llamado Jaguares, con la condición de continuar con su grupo. Su representante, Mauricio González, aprovechó esta circunstancia para que La Barranca se presentara en todas las plazas que visitaba Jaguares en sus giras en México y Estados Unidos, ayudando a que la banda se proyectara más, sin dejar de ser un grupo con concepto propio.

Ese año se editó también el disco compilatorio The Tequila Conection, donde aparecen con el tema “Esa madrugada.”

Para 1997, Alejandro y Federico dejaron Jaguares para concentrarse en La Barranca, mientras Alfonso continuó con ambas agrupaciones. Solían acompañarlos en sus presentaciones en vivo Cecilia Toussaint y Jorge Cox Gaitán, quien quedó integrado formalmente a la banda. Como cuarteto, comenzaron a trabajar en su siguiente disco al que llamaron Tempestad, y fue grabado en el estudio Submarino del Aire, de Alfonso André, en la Ciudad de México y mezclado por Mike Harris en Signature Sound, San Diego, en Estados Unidos, para BMG/Ariola. Contuvo temas como “Tal vez ni Dios”,”El velo”, “El faro”, “Belleza”, “El gran pez”, “Aeroplano” y “Como una sombra”, entre otros. Los sencillos promovidos fueron “La caída” y “Día negro”, ambos con video. En reediciones se incorporaron las canciones “El desafía 1”, “La ofrenda” y “Escafandra”, tema en el que tocó la batería “Bola” Domene. La portada es un grabado de Joel Rendón. Fue considerado como el disco mejor disco del año por la revista La Mosca y nuevamente fue bien recibido por los medios especializados.

En 1998 salió Ep “Día Negro”, que contuvo el tema en cuestión y tres remixes, además de su versión al tema cubano “Chan Chan”.

En 1999 salió Jorge “Cox” Gaitán y el grupo se puso a componer su siguiente disco como trío a la mitad del año. Para esta producción independiente usaron recursos de la música electrónica como sintetizadores, loops y sampleos, sin apartarse de su concepto sonoro, pero creando un discurso diverso. El disco Rueda de los tiempos apareció en el año 2000, najo licencia de Discos Manicomio, subsello de Universal Music. Grabado en el Submarino del Aire por Eduardo del Águila, que mezcló los temas instrumentales.

Los demás temas fueron mezclados los temas instrumentales. Fueron mezclados por Criag Brock en Estudio 19, en la Ciudad de México y Poundhouse, en Portland, Oregon. Contuvo temas como “Déja vu”, “Caravana”, “Jardín del tiempo”, “Martes”, “Vuelta interminable”, “Dentro de un siglo” y “Fortín”, entre otros. Manejaron como sencillo promocional el tema “Llueve”, que tenían un arreglo basado en arimbas. Tuvieron como músicos invitados a Cacilia Toussaint en la voz, Alejandro Otaola en la guitarra, Pedro Martínez en la percusión y marimba, Leonardo Corona en la percusión, Luri y Daniel Soberanas en el bajo acústico, Irving Flores en el piano, Edilio Gigio Montero en la trompeta, Arturo González en el violín, Artura Rebolleado en la viola y Mónica del Águila en el violoncello. José Manuel también interpretó el violín.

En los siguientes años salieron dos compilaciones que incluyeron temas La Barranca. Estos fueron: El más grande homenaje a Los Tigres del Norte, del 2001, con el tema “La banda del carro rojo” y Tequila sónico Vol.1, del 2002, con el tema “Esa madrugada”.

José Manuel conoció a Alejandro Otaola cuando coincidieron Santa Sabina y La Barranca en algunos conciertos y lo invitó a colaborar como músico invitado, tanto en el disco Rueda de los tiempos, como en las presentaciones posteriores. A su vez, Alfonso tenía que cumplir compromiso con Jaguares, y en ocasiones lo sustituyó el baterista José María Arreola. Cuando en 2001 Federico se fue a radicar al extranjero, La Barranca hizo una pusa y mientras, José Manuel sacó un disco solista al que llamó Yendo al cine solo. Mientras, José Manuel sacó un disco solista junto a Alejandro Otaola, José María y su hermano, el bajista Alonso Arreola (ambos nietos del escritor Juan José Arreola), que fueron parte de los colaboradores en su disco solista.

Con ellos se hizo después una nueva formación de La Barranca con la que entró al estudio para grabar el disco Denzura, que salió en el año 2003 con MW Recrods. Grabado en los estudios Submarino del Aire, Huitzilac y Estudio 19, de la Ciudad de México por Eduardo de Águila. El material de este disco estuvo dirigido hacia rock más pesado y contuvo temas como “Fascinación”, “Animal en extinción”, “Visión”, “No mentalices”, “Montaña”, “Lo rosa”, “Minotauro” y “Kalenda Maya”, entre otros. Participaron como invitados los músicos Federico Fong en el piano eléctrico, Cecilia Toussaint en la voz, Marco Antonio Campos en la percusión, Joe D´Étiene en la trompeta, Cherokke Randalph en la viola, Mónica del Águila en el violoncello, José del Águila en el violín, Arturo González en el violín y Eduardo del Águila en el plato tibetano.

El disco salió a la venta con un precio económico, con el cual buscaron hacer frente a la piratería. Sin embargo, encontraron que algunas cadenas de tiendas de discos boicotearon dicha iniciativa, negándose a vender a ese precio.

Ese año salió también la compilación Ofrenda a Rockdrigo González, producido por Alfonso Figueroa, compañero de Alejandro en Santa Sabina, con el tema “Perro en el Periférico”.

En 2004 lanzaron el Ep Cielo Protector, un material con una estrecha relación con Denzura, en cuanto a búsqueda estética. Contuvo los temas “Cielo protector”, “Bendición”, “Tsunami”, “El agua que cae” y “Cielo protector (demo)”. La peculiaridad de este lanzamiento fue que sólo tuvo distribución a domicilio vía internet. Contaron con un sitio especial de descargas exclusivas el cual podían bajar imágenes, audio y videos con entrevistas, sesiones de grabación, presentaciones en vivo, improvisaciones y demás material. Comprando el Ep Cielo Protector se añadía un interactivo para PC, que incluía el disco Denzura. Se produjo el video de “Animal en extinción”, en el que apareció el actor Daniel Jiménez Cacho. Participaron también Steven Brown en el saz y Alfonso André en los coros. A las habituales giras de La Barranca por México y Estados Unidos agregaron a Francia, mostrándose en sus conciertos como un grupo renovado en el cual el virtuosismo jugaba un papel fundamental.

En 2005 lanzaron El fluir, con Fractal Records. Para esta producción decidieron grabarse tocando juntos y sin ningún tipo de postproducción. Volvieron a Trabajar con Eduardo del Águila y fue grabado en el estudio El Cielo, en Monterrey, y El Potrero, en la Ciudad de México. Se mezcló en el Estudio 19, en la ciudad de México. Contuvo temas como “Dormir sin miedo”, “Por donde pasas”, “Zafiro”, “Una tarde en la vida”, “Ser destello”, “Cinturón de Orión”, “Hendrix”, “Si acaso hay vida” y “Pare de sufrir”, entre otros. La portada corrió a cargo de la diseñadora Claudia Sánchez y el logo lo creó el músico Fernando Rivera Calderón. La revista Rolling Stone México lo consideró uno de los 10 mejores del año, y La revista La Mosca, como el mejor disco del año. Se manejó como sencillo “Pare de sufrir”, del que se hizo un video. El disco fue editado simultáneamente en México y Estados Unidos.

En 2006 apareció su tema “Por donde pasas”, en el disco compilatorio1,2,3… por el rock. El grupo se presentó para entonces en el Festival Mexico Now, en la ciudad de Nueva York y en la FIL de Guadalajara.

En 2007 se cerró el ciclo con los hermanos Arreola y Alejandro. José Manuel acudió de nuevo a sus viejos compañeros Alfonso Andréy Federico Fong para rearmar La Barranca y meterse al estudio nuevamente. Con ellos grabó de manera de manera independiente el disco Providencia, que se lanzó en el año 2008. Fue grabado y mezclado en el estudio Submarino del Aire junto a Eduardo del Águila. Contuvo temas como “Nueva vida”, “La huida”, “Inventa”, “Una nota que cae”, “Atroz”, “San Miguel” y “Centella”, entre otros. Manejaron como sencillo “La expedición”, tema dedicado a Ricardo Ochoa. Contaron con la colaboración de los músicos invitados Jorge Haytan en la viola, Mónica del Águila en el violoncello, Rúben Albarrán en la voz, el grupo Muna Zul en los coros, Magali Aguilera en el piano, Rubén Cifuentes en la percusión y Eduardo del Águila en las copas de agua.

Con el apoyo de la Universidad de Guadalajara, al año siguiente editaron Construcción, un disco instrumental que estuvo íntimamente relacionado con su anterior producción, Providencia, ya que las piezas fueron creadas a partir de reconstruir ideas manejadas de ese disco. Contuvo temas como “Picos gemelos”, “Arquitectura”, “Recorrido”, “El principio”, “Muro” y “El retorno”, entre otros.

En 2012 incorporaron al percusionista Enrique Castro que con su marimba midi logró proveer de una nueva paleta de sonidos al grupo. Con él estuvieron presentando la musicalización de la película muda El fantasma de la ópera, por invitación de la Cineteca Nacional. En mayo de 2013 editaron, con distribución de Fonarte Latino, el disco Eclipse de memoria. Fue grabado junto a Eduardo del Águila en Artco Estudios, en Polanco,y en sus estudios personales. Contuvo temas como “El alma nunca deja de sentir”, “Ante la ley”, “En cada movimiento”, “El futuro más distante”, “Sequía”, “Siempre joven” y “El tiempo es olvido”, entre otros. Alfonso André también colaboró en la grabación de algunas baterías y contaron con Cecilia Toussaint en los coros, Yamil Rezc en la percusión, juno y batería, Agustín Bernal en el contrabajo Darío González en el Rhodes, mellotrón y hammond, Daniel Zlontnik en el sax soprano, sax tenor, flauta y el hulusi, Erick Rodríguez en el trombón, César Barreiro en la trompeta, Magali en el piano, Mónica del Águila Cortés en el violoncello, Arturo González Viveros en el violín y Érika Ramírez Sánchez en la viola. Presentaron el disco en el Teatro Diana de la ciudad de Guadalajara en una gira denominada Fuego de la Memoria. Un juego de palabras uniendo los nombres de su primer disco con el más reciente. Para el siguiente año, Eclipse de memoria también salió a la venta en acetato de vinilo.

Simultáneamente estuvieron presentado su trabajo con El fantasma de la ópera, llevándolo incluso a la FIL de Guadalajara en 2014 en donde el bajista Enrick Romero se incorporó como nuevos integrantes. Este dio pie a que esta úsica tomaron una dirección propia que se convirtió en el material de su siguiente disco. Para 2015 lanzaron, con distribución de Fonarte Latino, el disco instrumental Fatális

 

Fuente: “60 años de rock mexicano” – González, Rafael

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