Banda Bostik

  • Rafa Martínez

En 1983 Carlos Godínez, Eduardo Cruz, David Lerma y Fernando Mendoza acordaron salir de sus respectivas bandas para formar una agrupación nueva que representara lo que ellos Vivian en aquel barrio de Tlalnepantla, La Blanca, ubicado en la periferia de la Ciudad, que en lo general era un espacio industrial en donde la gente iba de paso, lo que acarreaba la inseguridad de esas calles, pues no existían muchos vínculos hacia el entorno.

Es a principios de los años 80´s cuando el rock resentía  rezago y la represión al rock y a todo lo que aludiera a este mismo, pues después de la prohibición del mismo resultado del Festival de Avándaro, el desarrollo de este género fue difícil y fue confinado a lo que se le denominarían los hoyos funkies y es precisamente en zonas como Tlalnepantla, en donde este rock comienza a tener cada vez más seguidores ávidos de buena música.

Los 4 jóvenes músicos, encontraron una bodega en donde ensayar por las noches, en donde además reunían a los camaradas del mismo barrio, quienes siempre que escuchaban música en aquel local que almacenaba productos epóxicos, abarrotaban la cuadra,  nombre de la banda surge precisamente como un apelativo de la gente que los iba a escuchar “vamos a ver tocar a los de la Banda de la Bostik”, esto porque los productos que se almacenaban eran precisamente de la marca Bostik, hasta que deciden dejarle el nombre de Banda Bostik.

Conforme iban juntando más gente del barrio a los ensayos, la banda se hacía cada vez más conocida, pues la influencia de blues con letras muy contundentes y rasposas hacen que la banda comience la difusión de su música en otros barrios, en donde definitivamente el sonido del grupo engancha rápidamente a los jóvenes.

Calles cerradas, pequeños bares, deportivos y en general en donde se pudieran conectar los equipos, eran los escenarios en donde día a día David Lerma, vocalista del grupo se pulía con la actitud que tenía al tomar el micrófono y controlar a la banda asistente para hacer de cualquier esquina un buen rock.

Es en 1985 cuando son invitados a dar el grito rockero en Tlalnepantla, justo a un lado del palacio municipal y es aquí cuando la banda da el primer impacto masivo a chavos banda y punks que ya se congregaban en este evento que venían de otros lugares como Ciudad Neza o Ecatepec y aquí es en donde comienza la expansión de boca en boca de su música.

Es hasta 1987 cuando graban su primer material discográfico “Abran esa puerta” con ediciones Pentagrama, grabado en los estudios Rac de Rafael Acosta, baterista mexicano de bandas como los teen tops. Un disco con un alto contenido de protesta, con letras crudas y con música potente que definitivamente marcaban un parte aguas entre todo lo que se había editado.

Este disco está considerado como uno de los más vendidos del rock mexicano, así como su inclusión entre los 25 discos que determinaron el rumbo del rock en México, según el curador de la fonoteca y periodista especialista de rock mexicano, Ricardo Bravo.

Con este material la banda Bostik comienza un recorrer por todos los espacios existentes hasta aquel momento, todos los hoyos funkies y locales como Rockotitlán en donde alternaban con bandas como Mara, El Tri o Botellita de Jerez.

Después de tocar es necesario grabar otro material, en donde Carlos Godínez y Eduardo Cruz trabajaron en los arreglos musicales a letras de ellos mismos y la participación de David Lerma, en donde el resultante es un disco que ve la luz en el año de 1988, De la banda pa la banda, editado por Discos y Cintas Denver, una disquera netamente de rock mexicano que apuesta en ellos y que los hace líderes del mercado, alternándolos con bandas ya consolidadas en la escena y con quienes tienen oportunidad de viajar a diferentes estados de la república.

Este disco es editado también en los Estados Unidos, lo que comienza a ser un producto de exportación con grandes oportunidades para la banda.

1989 se convierte en uno de los años más productivos de la banda, pues editan un disco en vivo desde el penal de Barrientos en Tlalnepantla, lo que hace de este material algo único, pues es un vestigio sonoro de lo que la banda provoca en vivo, además comienzan la grabación de otro disco de estudio, En Pie de guerra, con el que provocan que muchos grupos se nieguen a alternar con la Banda Bostik, pues es una de las bandas que más publico atrae para esos momentos.

Estados Unidos se convierte en un gran escenario para la Banda Bostik, para esos amantes del rock que cruzaron la frontera, la primera vez que la banda viaja hacia aquel país del norte, son rechazados en la frontera porque no cuentan con visa de trabajo, preocupados pues ya tenían pactados varias presentaciones, Charly y David Lerma, se cruzan indocumentados para poder cumplir con el compromiso ya pactado, lo que revela el compromiso de los músicos con su público.

La banda además se convierte en buscador de nuevos talentos, pues son portavoces de su casa discográfica que cada vez tiene más infraestructura para generar un movimiento real de rock mexicano.

En 1991 de nuevo entran al estudio para trabajar en el material Del Barrio, un disco que musicalmente se encuentra maduro, con guitarras muy bien definidas, “Lalo Blues” como es conocido por el público, se ha convertido en un guitarrista con un estilo propio, lo que le da a la banda esa particularidad y esa rasposidad en su propuesta.

En 1994 Fernando Mendoza deja la banda como baterista para impulsar a la banda como manager y llevarlos a nuevos rumbos, pues la escena con cada vez más seguidores, entra como baterista Alan Gómez “El Pillo” y con esta alineación firman con un sub sello de una disquera trasnacional que está produciendo rock y que está dando auge a un momento importante para la escena en México, Culebra Records, de BMG Ariola.

Este disco fue un arma de doble filo, pues al público cautivo de la banda no les gustó la idea, pues comentaban que se habían vendido al sistema que tanto habían criticado, aunque fue con este material que consolidaron su carrera en México, Estados Unidos y Sudamérica, lo que hace un parte aguas en la escena del rock mexicano, conocido también como Rock Urbano.

Este disco “En el camino” sale a la luz hasta 1996, abriéndole las puertas a un mercado que la banda aun no dominaba.

Después de este disco la alineación vuelve a cambiar, pues Charly Bostik deja la banda para dar lugar a un joven Jonathan Zúñiga, con quien siguen dando tocadas sin parar, presentándose en lugares que poco a poco se van abriendo a la escena como el Centro de Convenciones de Tlalnepantla, Ecatepec, Ex Balneario Olímpico entre otros.

La banda graba de nuevo un disco en el 2000, Hipotecados, de regreso en su casa discográfica Discos y Cintas Denver, con un sonido más crudo y más actual, la banda ya es reconocida en toda la escena como fundadora de este movimiento de rock urbano.

En el 2004 la banda graba su último álbum de estudio Genoma Humano, en donde su sonido es ya característico, ya es un clásico del rock y el cual se ha vuelto de culto al ser el último disco de estudio con canciones originales de la banda.

La banda es invitada a participar en el festival Vive Latino por primera vez, en donde el escenario e abarroto para ver a la banda Bostik, quienes dieron un gran show y quienes fueron unos de los más mencionados del festival.

El 9 de Julio de 2013 la banda tiene un accidente automovilístico en la carretera Salamanca – Irapuato, en donde perdió la vida el bajista Jonathan Zúñiga.

Es en este mismo año cuando la banda comienza la celebración de 30 años de la conformación de la banda y lo hace con una gira que comienza en los 10 Grandes del rock en el Centro Cívico de Ecatepec y que continua por el interior de la república, en donde se integran los miembros originales de la banda y que concluye en un gran acto en el Centro de Convenciones de Tlalnepantla.

De nuevo son invitados al Vive Latino, con esta alineación de los 30 años.

La banda sigue presentándose en festivales, tocadas y en donde se les convoque siendo un referente esencial de la música mexicana. 

En el año 2019 lanzan un nuevo material original despues de casi 15 años de no haber entrado a un estudio de grabación, el material lo realizan de forma independiente, bajo la producción de Lalo Blues y la grabación de Paco "El Mago" Rodriguez, con el que pretenden llegar a un nuevo público con nuevas melodías y siguiendo en la vigencia del público, este mismo año el disco es presentado en el Teatro Metropolitan en donde tienen a grandes invitados como Dr. Shenka de Panteón Rococó, Luis Alvarez "El Haragán", Gonzalo Olvera de Interpuesto. 

Durante el confinamiento de los años 20 y 21, se produce un disco homenaje a la banda, producido por Lalo Blues, en donde personajes del rock mexicano entonan las canciones ya clásicas de la banda haciendo un tributo a David Lerma "El Guadaña", la voz de la banda desde el principio.